COMPROMISO CON EL BIENESTAR: FUNDACIÓN IGNACIA ENTREGA 800 KITS DE ABRIGO A ALBERGUES DE ADULTOS MAYORES
La Fundación Ignacia ha entregado últimamente 800 kits de abrigo a adultos mayores, la mayoría con movilidad reducida, residentes en los albergues que apoya en Lima, el Callao y el Cusco, para protegerlos del intenso frío que soporta el país. Esta iniciativa refuerza el compromiso de esta centenaria institución, legado de doña Ignacia Rodulfo, de velar por el cuidado digno y oportuno de la población beneficiaria vulnerable.
Esta acción se adoptó en forma extraordinaria teniendo en cuenta que estas bajas temperaturas representan un riesgo significativo para la salud de esta población, aumentando la probabilidad de infecciones respiratorias, descompensaciones y otras afecciones relacionadas con el frío.
La necesidad de estos kits se identificó durante las visitas que realizó el equipo técnico de la fundación a los albergues, en julio último, donde se constató que las personas albergadas estaban expuestas a un frío intenso, especialmente en las mañanas y noches, en espacios con limitada calefacción o aislamiento térmico.
KITS ABRIGADORES
Cada uno de los 800 kits está diseñado para proporcionar protección completa y contiene artículos nuevos y de alta calidad, seleccionados por su comodidad, resistencia y facilidad de uso para personas con movilidad limitada. Incluyen un gorro de lana acrílica, una bufanda térmica, un par de guantes y un par de medias gruesas.
Los “kits abrigadores” fueron entregados directamente a la población del Albergue Canevaro, el Asilo de las Misioneras de la Caridad del distrito de Breña (Lima) y la ciudad del Cusco, así como en el Hogar de la Paz de la Congregación Misioneras de la Caridad de Lima y Cusco. Las personas albergadas en estos centros están consideradas como de mayores factores de riesgo, como la edad avanzada, enfermedades crónicas y dificultad para movilizarse.
Con esta intervención, la Fundación Ignacia busca no solo prevenir problemas de salud relacionados con el frío, sino también aliviar la incomodidad cotidiana y fortalecer la sensación de cuidado recibido por parte de los beneficiarios.
Esta labor forma parte del compromiso de la Fundación de adaptar su ayuda a las condiciones reales de la población que asiste, siguiendo los pilares de bienestar integral y cuidado digno que fundamentan su modelo de atención.